Edimburgo

Edimburgo. abril 2012

No podía dejar tamaña responsabilidad en manos de estos dos lunáticos, y por eso Ned Flanders acompañó a los estudiantes del IES Mediterráneo en su viaje a Edimburgo.

Roma

Beato Vázquez, ¡¡Santo subito!!

Camino de su entrevista al Vaticano

Hasta Roma, a entrevistarse con el Santo Padre, se ha desplazado Flanders para defender la causa de santificación del Beato Vázquez.


Ned Flanders, impresionado por las historias que le contó un amigo que era familiar del Beato, no dudó en abogar por la causa de su santificación. Muchos y diversos son los milagros atribuidos a Vázquez. Ya desde su nacimiento se reconoce el primero de ellos cuando con tan sólo meses de vida dejó de mamar los jueves, en un claro ayuno de penitencia.

De niño, también se conoce la historia de su caída del árbol. Vázquez se presenta magullado ante su madre y a la pregunta sobre lo que le había pasado, el niño Vázquez responde que fue el mismísimo maligno quien le empujó del árbol. También de esta época es su relación con la aparición de platos de fruta fuera de temporada, a petición de su madre.

Una parada ante el lugar de martirio 

Si misteriosos y fantásticos son estos hechos, no menos sorprendentes son las nuevas revelaciones que recientemente han ocurrido, atribuibles únicamente a su carácter milagroso. En presencia de científicos de reconocido prestigio, biólogos ellos, e incluso del descendiente directo del Beato Vázquez, conocido profesor de química, se producen recientemente nuevos hechos milagrosos. En una excursión al Mulhacen,  con las ascuas de la hoguera apagada, deciden encomendarse al Beato e introducir los chorizos en la hoguera. El milagro se produce en presencia de estos hombres de ciencia que quedan asombrados cuando los chorizos quedan perfectamente cocinados, pudiendo saborear los mejores chorizos de su vida, según relatan y sin que pudiesen encontrar estos espíritus críticos una explicación racional de lo ocurrido.

Discutiendo con filósofos paganos.

Terminamos nuestro relato con el hecho quizá más asombroso. En un lugar de jubileo al que concurrían con frecuencia los amigos antes mencionados, se encontraban un día dos de ellos, de los que para salvaguardar el buen resultado del proceso mantendremos su anonimato y los llamaremos “los compinches”,  resultó que por intervención del maligno, coincidieron en el mismo lugar en espacio y tiempo algunas amigas así como antiguas y actuales  pretendientas de uno de estos compinches, en algún caso acompañadas de sus novios. Ante el peligro que se cernía, un compinche le dijo al otro que corrían riesgo de que les partiesen las piernas ese mismo día, a lo que el otro compinche le recriminó  con estas palabras: “a mí no me metas en esto”. Fue entonces, estando la amistad de estos dos compinches -uno biólogo y otro filósofo, por lo que su testimonio es más creible- en peligro, cuando decidieron encomendarse al Beato, pues si éste salió indemne de su caída del árbol, de la misma forma podrían salir ilesos de este trance. Y fue así que pudieron salir con bien, y continúan hoy día luciendo su porte y manteniendo su amistad, gracias a la intervención del Beato Vázquez.

¡¡La capilla!!

Por todos estos hechos y otros que no se relatan por mor de la brevedad, Ned Flandres se ha dirigido al Vaticano para defender tan noble causa.

Nos despedimos con las bendiciones de los Santos Varones que acompañaron a Ned

Et cum spiritu tuo